El Salvador?

La casualidad de los nombres es una cosa berraca....es increible pensar que hay un pais que se llama El Salvador pero que realmente no salva ni se salva de nada. Me llamó la atencion la amabilidad de la gente, su forma de atender y estar pendiente del turista, pero tambien me sorprendio la cantidad de veces que fui advertido de que alguna cosa me podia suceder, como quien dice yo era mi propio salvador. Que cuidado con la mochila, que cuidado con el taxi, que cuidado en donde sea. Al final la paranoia fue la compañera ideal de este interesante viaje al hogar de las maras, lo famosos pandilleros centroamericanos que tan famosos se han vuelto por sus hazañas contra la poblacion. 

Me imagino que los malandros aquellos tambien le rezan al mismo Salvador como pasa con la virgencita, que es de todos y sirve para cualquier causa. En todo caso nadie le quita lo bailao, la experiencia fue muy interesante y tuve la oportunidad de conocer el monumento que le da el nombre al pais, El Salvador del Mundo, que lo ve uno en las placas de los carros, en las toallas que compran los turistas y en la camiseta de la seleccion de futbol.